Con la llegada del último mes de 2019 se prevé que habrán visitado Michoacán casi 10 millones de turistas, nacionales y extranjeros. Esa es la información. ¿Cuál es el fondo del mensaje?

Hace no mucho, entre 2009 y 2012, Michoacán era el estado peor calificado por la violencia desatada. El estigma creció (malamente se alentó) por la feroz disputa política que protagonizaron el expresidente Felipe Calderón y el ex gobernador Leonel Godoy.

Fue la noche más larga y oscura para la entidad, que ocupaba las primeras planas de los diarios y los mayores espacios noticiosos en radio y televisión de todo el país, difundida la noticia de un estado prácticamente a la deriva. No es exageración. En algunos medios internacionales se llegó a poner Michoacán como ejemplo de que México se aproximaba a ser un “Estado fallido”.

No, de ningún modo es exageración. En esos niveles llegamos a estar. Y por aquellos aciagos días, el turismo se convirtió en algo así como deporte extremoen Michoacán.

Porque a la noche más larga y oscura, siguió la pesadilla de las autodefensas. El enfrentamiento de todos contra todos. La desconfianza. Un territorio con escenas de guerra civil. No es exageración.

Como tampoco lo es afirmar que la recuperación de la imagen del estado y su reposicionamiento como destino turístico, debe ser considerado -desde ahora- como uno de los principales logros del gobierno de Silvano Aureoles y de la gestión de la eficiente secretaria de Turismo, Claudia Chávez López, quien desde la discreción y la prudencia que reclama el servicio público, anuncia enormes resultados.

Informar que la tendencia es firme y que al cierre del año se alcanzará y rebasará la cifra récord de visitantes, debe enmarcarse como parteaguas para la entidad y sus actividades económicas, sociales y culturales. 10 millones de turistas, después de lo que vivimos es, por donde se le quiera ver, una gran noticia con un profundo mensaje.

No tuvo la cobertura ni atención mediática que alcanzó el tema de la federalización de la nómina de los maestros, pero ahí quedó el lunes, para el
registro, el informe preliminar de la Secretaría de Turismo: 10 millones de turistas y Michoacán en ruta de ubicarse en el top de los destinos turísticos del país.

Y todo a fuerza de su historia, cultura, tradiciones, creatividad y talento desde sus comunidades y pueblo, porque hay que decirlo: no cuenta Michoacan con la oferta e infraestructura hotelera, por ejemplo, para competir con otros destinos.

Más grande el logro, sin duda. Historia que hay que contar: 2019, parteaguas para Michoacán y su actividad turística, económica y cultural.

¿Cuál es el mensaje?

Aquí se queda… ¡aquí entre nos!

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