Foto: Panamericana TV

Morelia, Michoacán

El síndrome de Asperger es un trastorno neurobiológico que básicamente se trata de una incapacidad para socializar, a decir de la psicóloga clínica del Hospital General de Zona No. 83 del IMSS, en virtud de que son pacientes con características de aislamiento social, dificultad para integrarse socialmente, con un lenguaje adecuado pero con dificultades para expresarse, obsesivo, poca o nula empatía y de acuerdo con otros estudios, también pueden caracterizarse por cierta torpeza física.

La psicóloga clínica expresó que no es un síndrome que llegue a presentarse con mucha frecuencia, y así lo demuestran las cifras delegacionales, que reportan 21 casos detectados y en tratamiento durante el 2017, y un leve ascenso a más de 40 diagnósticos con este síndrome en el año 2018.

El IMSS, aborda este padecimiento de manera multidisciplinaria, ya que es diagnosticado por psiquiatría y neurología, para la prescripción de fármacos; y por psicólogos y terapistas ocupacionales, para intervenir en la reintegración del paciente a la vida social.

Este acompañamiento psicológico que la Institución otorga, consiste, a decir de Carolina Rodríguez, en evaluar la alteración cognitiva para planear terapias específicas de aprendizaje y de manejo de las emociones, ya que no todos los casos son iguales.

Con base en estudios, la detección del Asperger es más frecuente en la infancia y preponderantemente en varones, sin embargo las características del trastorno se hacen notorias cuando el paciente comienza a interactuar socialmente. La falta de empatía, de acuerdo a investigaciones, se atribuye a una alteración en los circuitos neuronales que controlan el pensamiento y la conducta, provocando incluso que a las personas más severamente afectadas les resulte imposible reconocer el significado de una sonrisa o de cualquier otro gesto facial, corporal o cualquier comunicación no verbal.

Si se hace una revisión a los antecedentes de este padecimiento, podría decirse que es un trastorno de frecuente reconocimiento, pues apenas en 1990 se dio el reconocimiento internacional al síndrome de Asperger como una entidad clínica y en el año 2007 se declaró el 18 de febrero como el Día Internacional Asperger, el IMSS lo conmemora y tiene la capacidad para atenderlo.

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